Existen
varios casos documentados (y algunos que han llegado hasta la justicia) en que
se sospecha que Microsoft ha alterado el código de sus sistemas operativos para
que los programas de la competencia se ejecuten más lentamente o con errores.
Microsoft ha sido llevado a la justicia varias veces (y en algunas
oportunidades con fallos en su contra) por violaciones de la propiedad
intelectual.
También
es una práctica corriente que Microsoft, aprovechando su excelente situación
económico-financiera, compre a aquellas pequeñas empresas que se interponen en
su camino al desarrollar productos que pudieran competir con los suyos.
Una
táctica bastante utilizada por Microsoft para lograr el dominio del mercado es
la conocida como "Embrace and Extend" (adherir y extender). La misma
consiste en extender ciertos protocolos o normas más allá de los estándares de
manera arbitraria y unilateral, para que luego sólo los productos que los
implementen de la misma manera puedan interoperar de forma correcta. Sobran
ejemplos de este tipo de práctica (la implementación de SMTP de Microsoft
Exchange, la alteración a HTTP en Internet Information Server, entre
otras), pero la más notable quizás sea la que derivó en el juicio que Sun
Microsystems inició a Microsoft por haber extendido la especificación de su
lenguaje Java violando las condiciones de su licencia, que permite a
cualquiera implementar un compilador de dicho lenguaje, pero sin apartarse de
dicha especificación. El objetivo perseguido por Microsoft era que los
programas Javagenerados con su entorno de
desarrollo J++ solamente pudieran ejecutarse sobre Windows,
siendo que Java fue diseñado como un lenguaje que permitiera el
desarrollo de aplicaciones portables entre distintas plataformas (algo que,
evidentemente, no le conviene). Al fallar este intento, Microsoft tomó la
decisión de no incluir soporte para Java en su nuevo sistema operativo: Windows
XP.
Formatos cerrados y cambiantes
Los
formatos en los que se almacena la información han sido utilizados
históricamente por Microsoft con dos objetivos:
Imposibilitar
la interoperabilidad con programas "no-Microsoft".
Obligar
a los usuarios a actualizarse a nuevas versiones.
Esto
ocurre porque dichos formatos son "cerrados" y no están públicamente
documentados. Esto significa que solamente Microsoft los conoce y es el único
que puede realizar un programa que almacene o acceda a información en tales
formatos. El tener absoluto control sobre el formato, permite a Microsoft
cambiarlo a su antojo. Es bastante común que aplicaciones como Microsoft
Word utilicen nuevas formas de codificar la información en archivos .DOC
(siempre con la promesa de nuevas características, pero que técnicamente no es
justificado), lo que tiene como consecuencia directa que los archivos generados
por la nueva versión no pueden ser abiertos con versiones anteriores (aunque se
provee de una forma de almacenar los datos de manera compatible, requiere de
ciertos pasos adicionales). Esto produce que paulatinamente, ante la
circulación de archivos en el nuevo formato, los usuarios deban ir migrando
(con el consecuente costo) aunque no necesiten las "nuevas características"
(¿alguien usa funciones de Word del Office XP que no
estuvieran en el Word del Office 95?). Lo que logra Microsoft a
través de esto es limitar la posibilidad de elección de los usuarios que quedan
atrapados dentro de este verdadero círculo vicioso.
Debido
a la posición monopólica en la que se encuentra, Microsoft puede ejercer gran
presión sobre los fabricantes de hardware para computadoras personales. Dicha
presión se traduce, por ejemplo, en la prohibición de vender equipos con otros
sistemas operativos instalados, so pena de no brindar descuentos en la venta de
licencias de Windows u Office a dicho vendedor. Ningún
fabricante de computadoras personales osaría enfrentarse a Microsoft y perder
por esto la posibilidad de ofrecer sus equipos
con Windows preinstalado (y a un precio menor que el de venta al
público). Esto ha llevado a que, actualmente, sea muy difícil poder adquirir
una computadora de marca reconocida sin que en el precio esté incluido el costo
de, al menos, una licencia de alguna versión de Windows (aunque uno
no desee usar este producto)
De
la misma manera, se ha llegado al extremo de que los responsables de brindar el
servicio de soporte técnico de las computadoras equipadas
con Windows es el propio fabricante de las mismas. Esto es ridículo
porque dicho fabricante no posee los medios (documentación interna, código
fuente, etc.) para poder solucionar problemas ni corregir errores en el
programa. Nuevamente, los fabricantes deben aceptar estas condiciones para seguir
recibiendo un "trato preferencial" por parte de Microsoft.
Con
la llegada de Windows XP se ha alcanzado un nivel de dependencia aún
mayor: debido a las nuevas "funciones de seguridad" de Windows
XP (que no han impedido que un solo virus deje de funcionar bajo esta
nueva versión) los drivers o controladores de dispositivos deben ser
"certificados" por Microsoft para poder instalarse en el sistema.
Esto obliga nuevamente a los fabricantes de Hardware a mantener "buenas
relaciones" con la empresa, agregando otro mecanismo de presión.
Microsoft, mentiras y... "vapor"
El
término "vaporware" se utiliza normalmente para referirse a un producto
que es anunciado por una empresa, cuando realmente no existe (o no estará
disponible en los plazos prometidos). El objetivo de esta estrategia, utilizada
generalmente por empresas que se encuentran en una situación de dominio del
mercado, es desalentar a su competencia y crear una mezcla de inquietud,
expectativa y esperanza en sus usuarios.
Microsoft
ha recurrido muchas veces a este recurso. Ya hemos hablado de los siete años
que se tardó desde el anuncio oficial de Windows hasta su primera
versión realmente utilizable. Un caso similar se ha dado con Windows
95 (anunciado como Windows 4 en julio de 1992 y liberado en agosto
de 1995) y con Windows 2000 (cuya primera versión beta fue lanzada en
septiembre de 1997, bajo el nombre de Windows NT 5, y que apareció
finalmente en febrero del 2000). En todos estos casos se realizaron promesas de
supuestas funcionalidades y mejoras que no se cumplieron. En algunos casos se lanzaron
a la venta productos incompletos, como ocurrió con Windows NT 4, que
comenzó a ser realmente utilizable luego del llamado "Service Pack
3", liberado un año después de comenzada su comercialización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario